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Un análisis simplista del despido de Miguel Herrera “El Piojo”, como Director Técnico de la selección Nacional, nos diría que esta fue, debido a la agresión que profirió al comentarista deportivo de TV-Azteca, Christian Martinoli, infringiendo las normas éticas internas a que se comprometen los integrantes del grupo que maneja la representación nacional.

Estos fueron los argumentos centrales, que dio a conocer Decio de María, en la conferencia de prensa, en donde anunció el cese del “Piojo Herrera”.

Desde luego que fue reprobable lo realizado por Miguel Herrera, de agredir a un periodista, lo que se convirtió en “la crónica de una agresión anunciada”, ya que Martinoli ya había sido amenazado por el Ex-Técnico Nacional.

Pero nuestra reflexión es, que en un país que desea que su deporte progrese, requiere de una cultura deportiva a nivel social, una estructura que inicia en el sector estudiantil y amateur fuerte, que llegan a los clubes profesionales, precisamente con personas que sean verdaderamente profesionales y con los valores del deporte con los cuales fueron formados los niños y jóvenes que reciben.

Desde luego quien llega ya a este nivel, convierte su actividad en una forma de vida y se transforma en un profesional del deporte que le da los ingresos para sostenerse él mismo y a su familia.

El sector profesional, está muy lejos de moverse de esta manera, y al contrario hay muchas deficiencias e interese que pervierten al sector amateur y en el terreno profesional, se privilegian los intereses de corto plazo, y no a una visión de largo plazo.

Muestra de esto, es que en la preparación de la selección nacional siempre se prefirió el realizar partidos que dejaran dinero y no que sirvieran “al supuesto proceso de preparación”, y vimos dos representativos nacionales mal preparados.

La Selección “B”, aunque no se quiso reconocer así, fue improvisada para enfrentar a los mejores equipos de América, en el Torneo Sud-Americano de la “Copa América”, con el resultado que debió preverse, un fracaso, donde se mostró un bajo nivel.

En cuanto al supuesto torneo donde se ponían todas las canicas, la “Copa Oro”, se incorporó Miguel Herrera al “cuarto para las doce”, después de hacer muchas campañas publicitarias, donde lo veíamos sobre expuesto a los medios, en lugar de estar en su labor de Entrenador Nacional.

La consecuencia, llega un equipo poco trabajado, con jugadores que vienen de vacaciones, sin ritmo, algunos seguramente con algo de “Kilos de más” y para completar con lesionados.

De los fuera de forma, se notaron a grandes jugadores, que no es que hayan tenido baja de juego (que desde luego puede darse) sino, fuera de forma y ritmo, como Héctor Herrera y Carlos Vela.

Esta situación, no es responsabilidad sólo de Miguel Herrera, sino mucho también de las personas de pantalón largo, que siempre privilegian lo económico a la adecuada preparación del equipo tricolor y mientras esto no cambie, podrán traer al mejor entrenador del mundo y se seguirán viviendo procesos truncos de la “Selección Nacional”.

Sin justificar, ni decir que no debió de despedirse a Miguel Herrera, peso mucho la presión de los medios para su salida, y que no le quedara otra a la FEMEXFUT y no pudiera “hacerse de la vista gorda”, como ya lo ha hecho en muchos temas, por tanto, si solo nos quedamos con lo que dicen, perdemos de vista y dejaremos de pedir y hasta exigir que cambien las cosas, y que al menos en el terreno del Tricolor, se planeen bien sus procesos y empiecen a cambiar las cosas en nuestro deporte.

¿No lo cree usted así?.-AAGA.